lunes, 23 de julio de 2012

SER O NO SER...


Hay un sentimiento constante que surge en algunos seres, algo irracional que a veces no puede ser explicado mediante nuestro lenguaje. Hay sensaciones persistentes, como el golpe de un martillo, que despiertan de la modorra de la rutina que aplasta los sueños y amansa a los hombres. Muchos nombres le han querido dar a lo largo de la historia, pero yo no se como llamarlo. Pero siento una voz que me llama a levantarme, a luchar en guerras que muchos creen perdidas, a pintarme de los colores vivos en un mundo donde muchos prefieren ser hombres grises. Hay una risa que surge de lo profundo de mí ser aún en los momentos más oscuros, cuando todo alrededor parece no tener sentido ni razón. Y aunque los necios, los derrotados y las cabezas vacías apunten con sus discursos masticados y me quieran arrojar sus miserias, sigo, sin embargo, empujando por ser. Ser lo que se quiere ser o no ser nada. Ser lo que otros pretenden, o ser lo que uno siente. Ser los fracasos que los demás piensan que somos, o ser nuestro mayor éxito, buscando un sentido, un significado, una alegría profunda que no se logra escondiéndose en las limitaciones y deseos mezquinos de los hombres de estos tiempos, tan necios, tan brutales, tan pequeños en sus metas, manejados por los miedos, envidias y un materialismo atroz y destructivo.
Así que si ustedes que me leen, escuchan esa voz interior, sienten ese llamado, esa necesidad de levantar el puño contra la opresión y la mediocridad, no rechacen ese sentir, déjenlo fluir, que salga, sean lo que realmente quieran ser…o no sean nada.