domingo, 21 de marzo de 2010

ETERNOS INSTANTES DE LIBERTAD.

En este domingo gris y lluvioso recuerdo el domingo pasado a la tarde. Tuve un momento donde me senté en un café en la esquina de una gran avenida y me quede contemplando al sol mientras se ocultaba lentamente detrás de los árboles y edificios. En ese momento sentí que nada me perturbaba. Afuera estaba el mundo, sus problemas, las personas y sus locuras, sus exigencias y sus patéticas rutinas a las que llaman vidas. En ese momento estaba solo y sin ninguna obligación, nadie a quien responder por mis acciones, mis sueños y pensamientos volando libremente sin límites. En ese instante saboree la libertad. En la vida disfruto de muchas cosas, pero la libertad, no tiene precio. Cada día tiene más valor para mí. Por eso cada vez desprecio mas a las actividades y personas que hacen que uno pueda perderla y vivir reprimido, sin ser lo que uno es en realidad.
La vida es una sola, aquí y ahora. Muchas veces dije eso, vuelvo a repetirlo por que su importancia tiene que ser remarcada constantemente. Serás lo que sos o no serás nada...

1 comentario:

  1. Diria algo inteligente.
    Pero me siento muy atontado por los golpes de la vida como para decirlo.
    Simplemente dejo constancia de que pasé por acá

    ResponderEliminar